Comunales | La deuda interna

Pobres sobreviviendo

La enorme crisis que puso en descubierto la pandemia en el mundo, de car谩cter multidimensional, gener贸 m谩s pobreza y eso se puede visualizar en cada rinc贸n de la ciudad. En nuestros barrio, la multiplicaci贸n de las personas en situaci贸n de calle o que sobreviven cartoneando es ostensible. Tambi茅n ellos se organizan. De eso dimos cuenta en agosto. Buenos Aires, 28 de diciembre de 2021. Como en los peores momentos del 2001, la necesidad de muchos se corporiz贸 en la recurrencia a los oficios de supervivencia, ante la falta de mejores oportunidades. Por ello se multiplic贸 el n煤mero de cartoneros. Y surgi贸 en nuestro barrio un punto de encuentro y organizaci贸n en el que ellos mismos, solidariamente, solventan algunas de sus muchas necesidades. 

Entre ollas populares y riesgo ambiental
La Toma Cartonera de Once
 
Un grupo de recicladores urbanos ocupa desde principio de a帽o una terminal de micros en la calle Bartolom茅 Mitre, casi esquina 24 de Noviembre. All铆 acopian material, duermen y comen. Vecinos alertan por un aumento de robos en la zona y se帽alan que hay tanques de combustible en el predio.
 
Buenos Aires, 10 de agosto de 2021. 鈥淒ios le da las peores batallas a sus mejores guerreros鈥. La pintada se luce en lo alto de un muro en la terminal de micros de Mitre 3140-76 que, desde principios de 2021, est谩 ocupada por recicladores urbanos, quienes acopian materiales, pernoctan y tambi茅n se alimentan gracias a ollas populares. Por otro lado, hay vecinos que alertan que el lugar fue clausurado varias veces y presenta riesgo ambiental por la presencia de combustibles. Mencionan un aumento de arrebatos en la zona y hasta hablan de convivencia con vendedores de droga. 

鈥淓ste es el lugar donde vienen los cartoneros con sus materiales, ac谩 tambi茅n pueden descansar. Somos gente trabajadora que no molesta a nadie鈥, dice a este medio Luisa, una de las referentes del lugar. Asegura que su ubicaci贸n es clave por la cercan铆a a la zona comercial Once, donde se tiran gran cantidad de cartones, pl谩sticos y metales.

El galp贸n era utilizado tiempo atr谩s para alojar colectivos de la l铆nea 129. Sin embargo, desde antes de la pandemia esta empresa hac铆a 鈥渄ormir鈥 a los micros sobre la vereda de Mitre, dejando el predio vac铆o. Ante la toma, contin煤a haci茅ndolo, incluso estacionados sobre la vereda de enfrente, en la ex agencia h铆pica.

El inmueble est谩 dividido en dos sectores. Uno consta de un enorme cuadr谩ngulo al aire libre. En el frente tiene una reja y un pared贸n, donde han hecho un mural firmado por la Uni贸n de Trabajadores y Trabajadoras de la Econom铆a Popular (UTEP) y la Rama Cartonera del Movimiento Evita. Asimismo, se informa que all铆 funciona el merendero 鈥淟uz y Esperanza鈥. 

En el fondo hay algunas construcciones precarias y sobre el play贸n descansan varios carros y bolsones. En el frente los recicladores suelen estar a toda hora con sus carros, trabajando en la vereda. Pasadas las 21, se ve la llegada de camionetas o rastrojeros llenos de cartones y metales. La otra parte del predio consta de un enorme galp贸n, que se extiende en paralelo al sector descubierto. Tiene un 煤nico ingreso a trav茅s de una reja que siempre est谩 abierta. Al lado hay un pared贸n con este grafiti escrito: 鈥淐omedor Marginal Cartoneros de 11鈥.

Por dentro, bajo algunos pocos reflectores, el movimiento es constante. Hay varios recicladores separando, ordenando y pesando el material de los carros que reci茅n llegan de la calle. Tambi茅n le toman los datos a quienes los trajeron. Incluso hay quienes reducen el metal con amoladoras. Los gritos y el crujido de la maquinaria inundan todo alrededor. 
A un costado de bolsas y muebles, hay una oficina improvisada, con escritorio y papeleo, incluso una pizarra con precios de cart贸n y metales por kilo. All铆 se sienta Luisa, cara visible y referente en este lugar. 鈥淎c谩 vienen los cartoneros con su material, tambi茅n pueden quedarse a pernoctar. Es mejor estar ac谩 que en la calle que les puede pasar cualquier cosa鈥. Ante este medio repasa que hace m谩s de siete meses est谩 activa esta toma. Se帽ala que antes el lugar estaba vac铆o y que en la actualidad la polic铆a no los intenta desalojar. 鈥淓llos pasan y no nos molestan, saben que estamos trabajando鈥, dice Luisa.

Previo a la ocupaci贸n, en el fondo del galp贸n hab铆a una construcci贸n de una planta, una especie de casa con oficinas administrativas. Luisa cuenta que ellos mismos empezaron a hacer algunas construcciones complementarias para que puedan alojarse los recicladores.
En el predio hay una olla popular activa para darle de comer a los cartoneros. 鈥淗acemos el esfuerzo por dar un plato de comida. Ahora estamos necesitando una cocina y cualquier tipo de donaci贸n de alimentos鈥, asegura la mujer.

鈥淵o vengo de la calle y s茅 mejor que nadie lo que es tener que trabajar todo el d铆a en malas condiciones para tener unos pesos. Siempre es mejor trabajar que andar manoteando, robando, por ah铆鈥, dice Luisa. Tambi茅n aclara que los cartoneros 鈥渘o tienen nada que ver鈥 ni participan en la venta de drogas en la zona. Reconoce que antes de su llegada en ese galp贸n ya hab铆a algunos dealers o consumidores, pero que los recicladores solo buscan un techo para trabajar.

Pese a estas afirmaciones, la convivencia es compleja. Algunos vecinos de las manzanas linderas consultados por este medio aseguran que la zona siempre fue 鈥渄if铆cil鈥, pero que la presencia de la toma cartonera les genera mayor desconfianza. Hay quienes aseguran haber sufrido arrebatos de celulares y haber visto a los ladrones correr hacia el galp贸n.

El lugar fue clausurado por la Agencia Gubernamental de Control (AGC) en varias oportunidades, pero sigue activo. Integrantes de la ONG Buenos Vecinos BA sostienen que no lo desalojan por una 鈥渃onvivencia pol铆tica鈥 entre sectores de la econom铆a popular y autoridades porte帽as. Hicieron denuncias en las reuniones de Comisar铆as cercanas ante funcionarios de la Comuna 3 y del Ministerio P煤blico Fiscal porte帽o. 鈥淚niciamos un reclamo en la Defensor铆a de CABA y ponen mil trabas para avanzar鈥.

Fuentes de la ONG temen por el riesgo ambiental del predio, donde hay cisternas de suministro de combustible, seg煤n explicaron vecinos de larga data. 鈥淐on el acopio de materiales inflamables el peligro de explosi贸n se multiplic贸鈥, expusieron. La normativa porte帽a vigente postula que los terrenos donde se depositaron combustibles deben ser descontaminados y no tienen que ser habitados por un buen tiempo. Este no es el caso de Once.

鈥淓s la soluci贸n que encontramos los cientos de cartoneros que queremos trabajar, entendemos a los vecinos y sabemos que no es lo ideal, pero es lo que encontramos para no estar en la calle鈥, concluye Luisa. 

Juan Castro


Compartir nota en las redes sociales Enviar Imprimir

Dejanos tu comentario