Buenos Aires, 6 de noviembre de 2018. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires confirmó que cerrará la Escuela Infantil N° 6 del Distrito Escolar 6°, conocido como el Jardín del Hospital Ramos Mejía (Venezuela, entre 24 de Noviembre y Urquiza). Se perderán 160 vacantes escolares. El año que viene no funcionará más su lactario, para bebés de entre 45 días y un año. Luego, avanzará la clausura de salas hasta que deje de estar operativo. La comunidad educativa, con apoyo de legisladores y comuneros, está movilizada y desarrolla un plan de lucha. 

Las autoridades porteñas desde hace varios años tienen esta idea en la cabeza. De hecho, en 2016 les trasmitieron esta voluntad a integrantes de la comunidad educativa y a miembros del Consejo Consultivo Comunal 3 (Balvanera y San Cristóbal). El objetivo es que no haya escuelas en predios de hospitales porteños. 

Ahora, empiezan a ejecutar este plan. En concreto, el Ministerio de Educación e Innovación, a cargo de Soledad Acuña, dijo que, tras el cierre del lactario en 2019, correrán misma suerte las salas de 1 y 2 años en 2020 y 2021. "Las autoridades del jardín fueron informadas del cierre del lactario dos días antes de que finalice el periodo de Inscripción Online (para el ciclo lectivo 2019). Lo que hasta la confirmación de la noticia era un ´error del sistema´, en realidad se trataba de un plan orquestado desde el Ministerio", expresó la comunidad educativa del Ramos Mejía en un comunicado.

La Directora del Área Inicial de Educación, María Susana Basualdo, celebró una reunión con varias familias del Ramos Mejía en la sede ministerial de Paseo Colón al 200. "Fueron informadas por ella acerca de la decisión de trasladar las salas que permanecerán abiertas (de 3 a 5 años) a un edificio que se construirá en la Manzana 66 (Jujuy y Belgrano) que iba a generar 300 nuevas vacantes para la Comuna 3". 

En ese "traslado" se perderían las 160 vacantes del jardín maternal, a la vez que unas 25 docentes pasarían a disponibilidad. Tras la reunión, las familias expresaron su rechazo a esta decisión injustificada, destacando que las autoridades no tuvieron siquiera intenciones de negociar una salida. A su vez, las familias exigieron que la única solución es la reapertura del lactario, y el compromiso de que "no se cerrarán jardines maternales, sino que, por el contrario, se abrirán más”, añadieron.

Las familias, docentes, comuneros, gremios y legisladores están movilizados. Esto se ha visto a través de la presentación de varios pedidos de informes. Las legisladoras Lorena Pokoik y Paula Penacca (Unidad Ciudadana) impulsan uno de estos últimos al afirmar: "Mientras, se hizo una obra que refaccionó los techos del primer y segundo piso, trabajos de pintura y acondicionamiento de la instalación eléctrica, no se dispuso que los niños de 3 salas trasladadas provisoriamente puedan volver a las mismas. Las familias y los docentes reclaman que las niñas y los niños puedan finalizar el año en sus salitas, especialmente aquellos que egresan".

La comunidad educativa denuncia que consecuencia de este activo rechazo, hay "represalias" por parte del ministerio: "El ministerio conducido por Soledad Acuña y su mano derecha, Andrea Bruzos, decidió suspender la obra de reemplazo del techo del patio cubierto del jardín programada para este verano. Con esta provocación, el gobierno busca redoblar la apuesta contra la creciente movilización de familias, docentes y personal del hospital".

Las legisladoras hacían notar la necesidad de esta obra: "No se ha reparado o sustituido el techo de policarbonato del patio cubierto, que tiene severas filtraciones. Además, en los meses de calor, se corre el riesgo de deshidratación por las insoportables temperaturas que alcanza. La comunidad reclamó a las autoridades, a Infraestructura y a la Defensoría del Pueblo sin respuestas concretas hasta el momento. Por otra parte, no se ofreció ninguna vacante para inscripción en sala Lactario (de 45 días a 1 año), para el ciclo lectivo 2019. De tal modo, las familias no pueden anotar a los bebés en el mismo jardín donde cursan sus hermanitos. Muchas familias nos manifiestan su sentido de pertenencia y amor por este establecimiento del cual se siente excluidos”.

La ministra de Educación e Innovación, Soledad Acuña, disertó en la Legislatura porteña en el marco de las exposiciones por el Presupuesto 2019. Allí señaló que el año que viene abrirán más de 50 escuelas públicas nuevas. Sin embargo, no se refirió al cierre en el jardín del Ramos Mejía, pese a que el legislador porteño por Autodeterminación y Libertad, Fernando Vilardo, le hizo señalamientos al respecto. Acuña además dijo que el 80% de la demanda de vacantes escolares para niños menores de tres años está cubierta, pese a que hay grupos de familias que aseguran que el porcentaje es mayor. 

El ministerio porteño avanza con el proceso de licitación pública y adjudicación para hacer la escuela inicial de 300 vacantes dentro de la Plaza "De los Vecinos" Manzana 66 (Jujuy, Belgrano, Catamarca, Moreno). Se invertirán hasta $61.871.437 para construir un edificio de dos plantas con aulas para 25 estudiantes. Los obreros trabajarán en el lugar más de 330 días. Si no hay demasiados contratiempos, las clases iniciarían para el ciclo lectivo de 2020.

Dentro de la Comuna 3, el Gobierno porteño hará otra escuela infantil en Pichincha 1152. Costará cerca de $30.000.000 y su construcción demandará al menos 265 días, por lo que también se espera que esté para el ciclo lectivo 2020. 

                                                    Juan Castro

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