Editorial | Decreto unificando cinco hospitales

Lo que muestran las formas

El 17 es la desgracia, dicen los que saben de quinielas y cábalas. Ese día de setiembre fue desgraciado para la salud pública porteña. El Jefe de Gobierno, Horario Rodríguez Larreta firmó un decreto publicado el 17 de setiembre en el Boletín Oficial, unificando los hospitales Muñiz, Udaondo, Ferrer, Marie Curie y el Instituto de Rehabilitación Psicofísica, los cuales pasarían a conformar el Complejo Polivalente Hospitalario Sur.
Buenos Aires, 9 de octubre de 2018. La medida había sido largamente anunciada desde la época en que Macri era Jefe de Gobierno y siempre suscitó rechazos de las comunidades de profesionales y pacientes que integran cada uno de esos centros asistenciales y de gran parte de la opinión pública, que lo visualiza como claro desatino sanitario y un evidente intento de posibilitar un negociado con valiosos inmuebles públicos.

Más aún, la iniciativa se había anunciado otra vez a principios de este año mediante una nota de las autoridades sanitarias a los directores de los centros afectados, en la que anticipaban que en el trascurso de este período legislativo se realizarían los "relevamientos y rondas de acuerdo tendientes a definir el alcance y características del proyecto", según consta en la nota  firmada por Daniel Ferrante, subsecretario de planificación sanitaria del Ministerio de Salud, tal como publicó Diario Popular el 4 de mayo.

Sin embargo, en agosto la oposición pedía informes en la Legislatura sobre cuál era el estado de avance del proyecto del Ejecutivo, ya que hasta ese momento no había ingresado ninguno para su tratamiento parlamentario, donde la bancada oficialista cuenta con mayoría. Evidentemente, Larreta decidió no pagar el costo político de un debate público del proyecto macrista, lo que arroja sospechas de que también es alcanzado por el deterioro político que corroe a su mentor y principal dirigente del PRO Cambiemos, debido a la enorme crisis económica, social y política que desató y no sabe contener. 

Aunque probablemente y forzando la disciplina de sus legisladores y algunos aliados, Larreta cuenta con el número de votos propios en la Legislatura para aprobar esta iniciativa, por su dinámica institucional el espacio parlamentario permite una visualización mayor de las controversias que suscitan este y otros proyectos polémicos, como la UNICABA. La vía del decreto sorpresivo elude gran parte de la escenificación posible de la polémica y el silencio de la corporación mediática cómplice del macrismo, completa la operación de mantener al grueso de la población desinformada y paralizada ante hechos consumados.

Pero el golpe de mano todavía tiene que enfrentar la realidad de la resistencia social a estas maniobras. Colocar a pacientes con insuficiencias respiratorias graves (que se atienden en el María Ferrer) junto a quienes padecen enfermedades infecciosas de similar gravedad (como los que se atienden en el Muñiz) sólo los instala en una situación de riesgo agravado para sus frágiles capacidades. 

Desconocer estas elementales medidas de profilaxis, asociadas con el adecuado aislamiento y la prevención necesaria es propiciar la difusión de patologías, como ha ocurrido este año con la multiplicación de contagios de tuberculosis entre profesionales de la salud por falta de adecuada higiene de los ámbitos de trabajo. Es que en tiempos de ajuste, la salud sólo significa un costo, que debe reducirse, como ya se achicó el número de camas de internación y las prestaciones que brinda el sistema público de salud de la ciudad. Una cuestión que no se tapa haciendo veredas. 

Lic. Gerardo Codina




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