Comunales | Teatro Luisa Vehil

Un terreno en venta

El cartel fue colocado a mediados del mes pasado. Anuncia la venta del edificio que ocupa el Teatro Luisa Vehil apenas como un terreno, con sus medidas anotadas en el aviso. El mayor legado de la actriz Luisa D´Amico es rematado por sus once herederos, que sólo piensan en cobrar su parte. Una historia de esfuerzos y sueños colectivos amenazada por la indiferencia gubernamental y requerida de la solidaridad de todos.
Buenos Aires, 5 de junio de 2018. El Teatro Luisa Vehil está emplazado en Balvanera, dueño de un importante acervo cultural, zona en la que vivieron González Tuñón, Leopoldo Marechal, Carlos Carella, Luisa D´Amico, entre otros. El portal Pura Ciudad publicó el 23 de mayo la novedad. "Nos fuimos un rato, volvimos y ya estaba el cartel", bromea Rubén Hernández Miranda, director del teatro y presidente del Centro Cultural y Asociación Civil Luisa Vehil. Se refiere al aviso de venta del inmueble de Hipólito Yrigoyen 3133, donde desde hace casi 30 años funciona la sala fundada por la actriz Luisa D´Amico en el solar de una antigua carbonería. Bromea con gesto amargo porque presiente que esta vez es definitivo, que el tiempo se acaba. "Tenemos plazo para juntar el dinero y comprar el lugar antes que termine julio. El cumpleaños 30 del teatro es el 7 de octubre, ojalá sea con las puertas abiertas", agrega.

La entusiasta Luisa D´Amico, actriz de gran trayectoria, fundó en vida este teatro con sus recursos y hasta el día de su muerte lo sostuvo incansablemente. Fue a principios de la década del ochenta cuando ella tomó la decisión de levantar su propio teatro. Vendió todo lo que había adquirido durante su carrera, sus ahorros, sus joyas y, junto a su madre, se mudaron a la vieja y derruída casa de la carbonería.

Los ocho años de construcción de la primera etapa fueron difíciles. Sus ahorros no le alcanzaron para poder terminar la primera parte de la obra. Según recuerdan varios testigos de esos momentos y ella relató en vida a Síntesis Comuna 3, andaba entre escombros, arena, cemento y ladrillos. Toda aquella instancia fue muy sacrificada cuando el objetivo era llegar a terminar la primera etapa de la construcción. No alcanzaba el dinero, recorrió organizaciones, empresas, fundaciones, Secretarías de Cultura. Fue entonces que Luisa Vehil ayudó desde su lugar de presidenta del Fondo Nacional de las Artes. 

Corría el año 1988 y D´Amico inauguró el teatro y, dentro de él, la sala en el primer piso, a la que llamó Sala Victoria, en recuerdo de su abuela. Y a su teatro lo llamó Luisa Vehil en homenaje en vida a su admirada y gran amiga que estuvo presente el día de la inauguración, a la que asistió en sillas de ruedas. 

La fundadora falleció en 2007. Desde entonces los once herederos buscan vender el inmueble o conseguir el dinero equivalente. En todos estos años la asociación civil que ahora lo sostiene con su actividad constante, les pagó un alquiler mensual para funcionar. Ahora tienen un desafío mayor. Reunir los fondos para adquirir el predio y continuar el legado de su fundadora. Los que quieran colaborar con este propósito, pueden depositar sus aportes en la Caja de Ahorro 16443/2 del Banco Ciudad, CBU 0290009410000001644325 a nombre del Teatro Luisa Vehil, Centro Cultural, Asociación Civil. El dinero será destinado a concretar la compra del inmueble.


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