Comunales | Larreta en la Manzana 66

Otro espacio verde

Rodríguez Larreta recorrió ayer las obras de la Manzana 66: "Va de la mano con nuestra política de sumar más espacios verdes", dijo. Así se concreta el proyecto vecinal nacido en oposición al proyecto privado de hacer un microestadio en una de las zonas más desprovistas de espacios verdes de la ciudad.
Buenos Aires, 24 de abril de 2018. El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, recorrió ayer lunes las obras de la Manzana 66 de Balvanera, un proyecto creado junto a los vecinos que va a sumar un nuevo espacio verde y público al barrio. "Este es otro sueño que se empieza a hacer realidad", explicó el Jefe de Gobierno, y dijo que "se trata de un histórico pedido de los vecinos del barrio que va de la mano con nuestra política de sumar más espacios verdes a la Ciudad". Rodríguez Larreta también destacó que "para esta zona de Once es muy importante porque es la zona que menos espacio verde tiene en la Ciudad".

Ubicado entre las avenidas Jujuy y Belgrano y las calles Catamarca y Moreno, este nuevo parque de una hectárea tendrá 88 nuevos árboles, una nueva escuela pública de nivel inicial, más seguridad y más luminarias. "Esto no solo mejora la calidad de vida de todos los que viven acá alrededor, que van a tener un jardín en su casa, sino que además suma a esta necesidad que tiene la Ciudad en general de tener más espacio verde y público", señaló.

La obra se divide en dos sectores. El más importante, de 10.271 m2, va a estar destinado a la creación del parque público que va a privilegiar la superficie verde con senderos y mobiliario urbano con juegos didácticos infantiles, una estación de Ecobici, estaciones saludables, mesas de ping pong, un circuito atlético con estaciones aeróbicas y WiFi gratis. En el resto del espacio, desde la esquina de Catamarca y Moreno, el Ministerio de Educación va a construir una escuela de nivel inicial para 250 chicos vecinos de la zona de Comuna 3. 

El Jefe de Gobierno confirmó que la obra estará terminada para principios del año próximo y que "ya el verano que viene los chicos y los vecinos del barrio van a poder disfrutar de una nueva plaza". "Quiero aclarar que el diseño fue donado a la Ciudad por uno de nuestros principales artistas, que es vecino del barrio, que es Pablo Siquier", recordó.

El proyecto fue diagramado junto a los vecinos a través de un proceso de co-creación. Va a mejorar la conectividad con el transporte público por su cercanía a las estaciones de subte de la línea H y a las renovadas paradas de colectivos de la avenida Jujuy. A su vez, va a generar alrededor de 100 puestos de trabajo.

Del microestadio a la plaza

La Manzana 66, gracias al trabajo de los vecinos, se convertirá en un espacio verde. Donde hubo edificios, luego canchas de fútbol 5 y hasta sobrevoló el fantasma de la construcción de un microestadio para shows musicales, se está levantando una plaza, diseñada por el reconocido artista Pablo Siquier.
 
El proyecto transforma completamente una zona central de Once, al convertir una manzana en un parque abierto con una amplia área de juegos infantiles, áreas de descanso y una escuela primaria con un diseño de vanguardia. La manzana estaba en manos de un privado que deseaba construir un microestadio. Pero la negativa de los vecinos fue rotunda. Ante esta situación y luego de la sanción de una ley de expropiación en la Legislatura,  el Gobierno de la Ciudad negoció con el dueño del predio y logró cambiarle el terreno por otro ubicado entre la avenida San Isidro Labrador y las calles Vedia, Pico y Vidal, del barrio de Saavedra.
 
Se realizaron varias reuniones con los vecinos, que reclamaban la creación de un espacio verde. El acuerdo al que llegaron es que la plaza tendrá una escuela, juegos infantiles, mesas de ping pong, bicicletas fijas y un circuito atlético. La plaza no tendrá rejas perimetrales, pero sí cámaras de seguridad e iluminación LED.
 
La Comuna 3, comprendida por Balvanera y San Cristóbal, cuenta hasta ahora con tan solo 0,38 metros cuadrados de espacio verde por habitante, cuando la Organización Mundial de la Salud recomienda que debe haber al menos 10.
 
La plaza tendrá un cordón perimetral arbolado, con bancos para sentarse y lugares para compartir. Hacia el interior estará el espacio verde propiamente dicho, diseñado por Siquier. "Vimos mil plazas -recuerda el artista, que ya realizó murales en el subte y en Puerto Madero- Los arquitectos me bombardearon. Pero yo vivo de caminar ciudades y ya tenía mil imágenes. Francia, por ejemplo, tiene un muy buen equipamiento para niños y recordaba parques más ornamentales, otros que son más silvestres, como los ingleses. El paisajismo inglés es aparentemente más descuidado, había muchos puntos de partida posibles", señaló Siquier en una publicada por La Nación.
 
"Todo el tiempo pensábamos "qué pasa si una persona camina por acá, si viene un muchacho con su novia, si viene alguien en una silla de ruedas", había un montón de requerimientos de los vecinos y algunos eran contradictorios. Algunos querían una pista de skate y otros que no hubiera niños", afirma el artista, que donó su trabajo y se siente orgulloso de dejar una marca tan importante en el barrio.
 
Siquier dice que el tránsito peatonal por la plaza tendrá dos ritmos. La manzana está a tres cuadras de Plaza Once y hay mucha gente que va apurada de un lado para otro para hacer combinaciones de colectivos. Entonces, los arquitectos diseñaron una parte que contempla esa velocidad y otra que es más lenta, creada por el artista. "Hicimos una serie de canteros que no te llevan a ningún lado y la elevación te aleja un poco de la calle", describe.
 
El suelo de la plaza va a mantener el metro y medio de diferencia que tiene actualmente con la vereda. El tablero verde diseñado por Siquier y los senderos tendrán suelo absorbente, ya que una de las principales funciones de la plaza será filtrar el agua de lluvia. La obra costará 48.185.419 pesos y estará finalizada para fin de año. 
 
"Además de los usos que quieren los vecinos, la plaza tendrá un enorme valor cultural", afirmó el arquitecto Álvaro García Resta, subsecretario de Proyectos del Ministro de Desarrollo Urbano y Transporte y responsable directo de las obras. "Las plazas porteñas tienen la cultura insertada con un objeto, como puede ser una escultura o un mural. Lo interesante de esta plaza es que es una obra de arte en sí misma, viva, que se completa con la gente", asegura.


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