Buenos Aires, 5 de diciembre de 2017. A mediados de noviembre, la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal confirmó el fallo de primera instancia y condenó a los gobiernos nacional y porteño a resarcir a la familia de un joven muerto en el incendio del 30 de diciembre de 2004 en  1.305.800 pesos, monto que con los intereses podría superar los 4.700.000 pesos. La noticia fue publicada por el diario La Nación el 19 de noviembre. La víctima era mecánico, tenía 31 años y sostén económico de sus padres. Fue una de las 194 víctimas de la trampa mortal del boliche República Cromañón, ubicado a media cuadra de la Plaza Once.

No es el único caso. Hubo otra en favor de un sobreviviente. Se trata de D.N., de 31 años, que según peritajes médicos, sufre angustia, depresión clínica, además de sentir culpa por un amigo que murió en el lugar, padece pesadillas que no le permiten dormir bien y tiene ideas suicidas. La Sala IV de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo Federal subió todos los montos de la indemnización y resolvió actualizar las cifras contando los años transcurridos. Según el segundo fallo, la reparación por los daños sufridos asciende a casi 1.000.000 pesos. Pero el Estado nacional interpuso un recurso extraordinario federal y así el juicio deberá ser resuelto definitivamente por la Corte Suprema de Justicia.

Hay más. Este medio publicó el mes pasado que la Justicia condenó a los gobiernos nacional y porteño a pagar el 70 por ciento de la indemnización -35 por ciento cada uno- que recibirán dos hermanos víctimas de Cromañón, los que reclamaron una indemnización por asistencia psicológica y daño moral, al considerar que tuvieron mayor responsabilidad en la tragedia que los músicos de Callejeros y los organizadores, quienes tendrán que hacerse cargo del 30 por ciento restante. Aunque todavía deben actualizarse los montos, la Cámara determinó que uno de ellos reciba 268.000 pesos y el otro 208.000.

No obstante, el fallo aclara que las víctimas "se encuentran habilitadas a exigir el pago total de la deuda a cualquiera de las partes condenadas en este juicio", es decir que Nación o Ciudad podrían tener que pagar las indemnizaciones completas. "Tanto el Estado Nacional como el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires resultaban responsables dado que sus dependientes no hicieron cumplir las imposiciones legales, ni observaron sus obligaciones como funcionarios", subrayaron los jueces Marcelo Duffy, Jorge Morán y Rogelio Vincenti.

El fallo también rechazó un pedido del gobierno porteño para que se descontara de la indemnización final los montos que por subsidios vienen percibiendo las víctimas desde que ocurrió el siniestro. 

Esto sólo es el principio. Según el abogado José Iglesias, padre de una de las víctimas, hay que "tener en cuenta que el propio gobierno porteño en un informe de auditoría de noviembre de 2011 tenía prevista una contingencia de 1400 juicios por esta tragedia". 

Cabe recordar que la llamada tragedia de Cromañón fue un incendio producido la noche del 30 de diciembre de 2004 en el boliche República Cromañón, durante un recital de la banda de rock Callejeros. Este incendio provocó uno de los mayores desastres no naturales en Argentina y dejó un saldo de 194 muertos y al menos 1432 heridos. Sólo ellos suman más 1600 víctimas, sin contar todos los que vivieron los hechos y, por suerte, no sufrieron daños físicos. 

Un número difícil de computar porque el lugar estuvo abarrotado de personas, mucho más allá de su capacidad, debido a la codicia de los organizadores. Se sabe que el local estaba habilitado con una capacidad de hasta 1031 personas, pero la justicia estableció que esa noche entraron por lo menos 4500. Se habían vendido un total de 3500 entradas y se calculó que entraron 1000 personas más sin entrada.

Luego se supo que, además, no era la primera vez que en el lugar se encendía fuego. Unos pocos meses antes, el primero de mayo de ese año, había ocurrido un principio de incendio durante un recital de la banda Jóvenes Pordioseros. En aquel momento, todas las personas presentes en el local fueron evacuadas y las llamas extinguidas por el personal de seguridad de Cromañón. También cinco días antes de la gran tragedia, el 25 de diciembre, otro principio de incendio se produjo durante un recital del grupo La 25.  La tragedia llegó el 30. Callejeros promovía su show de bengalas y en República Cromañón eso hizo el cocktail fatal. Una bengala tocó la media sombra que recubría el techo y provocó el fuego que generó un humo tóxico. Además del exceso de gente, las puertas de emergencia estaban cerradas por fuera. Una perfecta trampa mortal.

El primer condenado fue Omar Chabán, administrador del lugar, que murió hace tres años, debido a un cáncer linfático. Chabán fue una figura muy importante para el desarrollo del rock argentino de finales en los años 80 y 90, ya que dos lugares emblemáticos de la música emergente de la época, Café Einstein (que funcionó durante la primera mitad de los años ochenta) y Cemento, eran de su propiedad. 

Recién en abril del 2011, luego de varias medidas judiciales a lo largo de casi siete años, la Cámara de Casación revisó la sentencia condenando a Chabán, Callejeros y otras personas involucradas como partícipes necesarios del delito de "Incendio Culposo seguido de muerte en concurso real con cohecho activo". Finalmente el 17 de octubre de 2012, Chabán fue sentenciado a 10 años y 9 meses de prisión. Pero allí no terminó la labor de la Justicia, que sigue produciendo novedades en este caso.

Santiago Pujol

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