Sociedad | Primarias y elecciones de medio término

Las votaciones que molestan

Buenos Aires, 9 de agosto de 2017. Pese a
que el gobierno de Mauricio Macri aseguró que las PASO no se usan y que busca
derogarlas en 2019, las elecciones primarias del 13 de agosto servirán para que
haya competencia efectiva de candidatos a diputados nacionales en 41 partidos
políticos en 18 provincias. Para senadores, la disputa abarcará a 4 fuerzas. En
total habrá 45 PASO en los 24 distritos para cargos nacionales, a razón de 1,9
en cada uno.



Macri y
sus principales funcionarios aseguraron en estos días que las PASO no sirven porque
“nadie las usa y son costosas” ($ 2800 millones). Así planteó la idea de
derogarlas para las presidenciales de 2019. Macri criticó el 1 de agosto las
elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) que en pocos
días convocarán a los ciudadanos a las urnas para determinar qué candidatos
podrán postularse a los comicios legislativos de octubre. “No me gustan las
PASO, no me gusta que se pierda el tiempo”, dijo Macri al Canal 9 de la
provincia de Salta (Norte). El sistema de primarias obligatorias implica un
gasto de “plata inútil, cuando hay tantas cosas por resolver, tantos problemas
en la sociedad que necesitan una solución”, señaló el mandatario.



Margarita
Stolbizer, titular del GEN, que comparte fórmula con Sergio Massa, aportó lo suyo.
“Es una locura lo que se gastará. Tengo proyectos presentados para derogar esas
normas que no sirven absolutamente para nada. Es ridículo que sea obligatorio
para los ciudadanos”.



No dijo
que los primeros en vaciar de sentido las primarias son los partidos que
decidieron no poner en manos de sus adherentes la determinación de las
candidaturas y que habilitan sólo una lista. En la ciudad, por ejemplo,
únicamente habrá competencia en las filas de Unidad Porteña, donde compiten
tres sectores por la representación de la coalición que reúne fuerzas de
izquierda junto al peronismo y al kirchnerismo porteño.



En
sintonía con lo planteado por distintos referentes políticos que piden que las
PASO no se realicen, una petición online juntó más de 17 mil firmas para evitar
que se lleven adelante. El argumento es simple. “Hay muchos partidos que
presentan un único candidato y pueden pelear directamente en las elecciones
generales de octubre”, asegura la solicitud impulsada por un técnico
informático que subraya que “el objetivo oscuro que tienen las PASO es censar
en forma indirecta cuál es el candidato o los candidatos que pueden sacar más
votos”. O sea que el temor es que se ponga en evidencia quién reúne más
respaldo popular. Temor que suelen tener quienes anticipan una derrota, claro.



Pero no
se trata sólo de las PASO. También las elecciones legislativas de medio término
son cuestionadas. Las críticas vienen todas del mismo lado. Horacio Rodríguez
Larreta, por ejemplo, cuestionó el sistema eleccionario cada dos años y aseveró
que los ciudadanos “hiper estimulados” no quieren esperar tan poco “para volver
a opinar de su gobierno”. Estas declaraciones demuestran la sintonía que existe
en el oficialismo, ya que el presidente Mauricio Macri también se posicionó en
contra de las votaciones de medio término.



De gira
por el país en plena campaña electoral, Macri reconoció también que tenía sus “dudas
sobre la elección intermedia”, en alusión a los comicios legislativos que se
celebrarán el 22 de octubre, dado que “el tiempo es escaso” y los actos
proselitistas demandan “tanto tiempo adicional”. “Creo que lo más sano sería
elegir cada cuatro años todos los cargos, pero encima hacerlo doble vez ha sido
una experiencia frustrante”, añadió el presidente.



También
habló la vicepresidenta, vecina de Comuna 3. Gabriela Michetti consideró que “lo
más efectivo sería, por lo menos durante un tiempo, evitar las elecciones de
medio término” al argumentar que “la competencia destructiva” que se genera
entre los partidos políticos en años electorales suele complicar los planes de
un gobierno.



La
vicepresidenta hizo estas declaraciones al reconocer que actualmente, por las
elecciones legislativas, “el clima político está tiñendo todas las cuestiones”,
sumado a que “es el momento de mayor confrontación de la sociedad”. En diálogo
con Radio Nacional, Michetti fue consultada por su opinión acerca de que las
elecciones se hagan cada seis años, y respondió: “No sé bien qué es mejor...
uno a veces piensa que es mejor seis, a veces que es cuatro... Me parece que lo
más efectivo sería pensar que, en vez de alargar la presidencia a seis años,
por lo menos durante un tiempo evitar la elección de medio término”.



Todo
método se puede mejorar, claro. Pero al menos resulta sospechoso rezongar
contra las elecciones cuando todas las encuestas señalan que al oficialismo le
costará superar el 30 por ciento de los votos en el total nacional y, encima,
que Cristina Kirchner asoma como clara vencedora en el decisivo territorio
bonaerense. Poca fe democrática, la de estos republicanos.



                                                                                                                       Norberto Alonso



 


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